DOMINGO DE RESURRECCIÓN / CICLO C

Vidrieras

DOMINGO DE RESURRECCIÓN / CICLO C

Espero la resurrección de los muertos - Parroquia de la Asunción de la  Santísima Virgen

 

El Domingo de Pascua celebramos la resurrección de Jesucristo de entre los muertos que iremos rememorando los domingos de todo el año. El triunfo del Señor resucitado sobre el pecado y la muerte es el acontecimiento que fundamenta de nuestra fe cristiana. Nos configura como creyentes y transforma de raíz nuestra vida.

Jesucristo nos hace partícipes de su victoria. Los cristianos estamos llamados a ser testigos del gozo Pascual. La resurrección del Señor no la podemos dejar de anunciar al mundo entero. A todos afecta y nadie está excluido de recibir el don de la vida eterna que Cristo nos ha posibilitado con su muerte y resurrección.

La fuerza que infunde en nosotros el Espíritu del Señor resucitado por el bautismo nos posibilita empezar a nacer a una vida nueva, cuya plenitud alcanzaremos cuando participemos plenamente de su Pascua. Mientras tanto, la experiencia del Señor resucitado nos impulsa a una vida renovada en Cristo para ser sus testigos ante los demás.

Vivir como resucitados es el desafío que asumimos como cristianos. Lo que motiva nuestra entrega diaria y nos convierte en luz para cuantos nos rodean. La fe en la resurrección de Jesús será el proceso ineludible para convertirse en creyente (cristiano). La lectura de la Palabra de Dios del Domingo de Pascua marca el itinerario de todos.

 

 

Lectura del santo evangelio según san Juan 20, 1-9

 

El primer día de la semana, María la Magdalena fue al sepulcro al amanecer, cuando aún estaba oscuro, y vio la losa quitada del sepulcro.

Echó a correr y fue donde estaban Simón Pedro y el otro discípulo, a quien Jesús amaba, y les dijo:
«Se han llevado del sepulcro al Señor y no sabemos dónde lo han puesto».

Salieron Pedro y el otro discípulo camino del sepulcro. Los dos corrían juntos, pero el otro discípulo corría más que Pedro; se adelantó y llegó primero al sepulcro; e, inclinándose, vio los lienzos tendidos; pero no entró.

Llegó también Simón Pedro detrás de él y entró en el sepulcro: vio los lienzos tendidos y el sudario con que le habían cubierto la cabeza, no con los lienzos, sino enrollado en un sitio aparte.

Entonces entró también el otro discípulo, el que había llegado primero al sepulcro; vio y creyó.

Pues hasta entonces no habían entendido la Escritura: que él había de resucitar de entre los muertos.

Parroquia Sagrados Corazones
parroquia.sscc.madrid@gmail.com
No hay comentarios

Sorry, the comment form is closed at this time.

Esta web utiliza cookies propias y de terceros para su correcto funcionamiento y para fines analíticos. Contiene enlaces a sitios web de terceros con políticas de privacidad ajenas que podrás aceptar o no cuando accedas a ellos. Al hacer clic en el botón Aceptar, acepta el uso de estas tecnologías y el procesamiento de tus datos para estos propósitos.
Privacidad